Baños curativos
Este método utiliza la salinidad natural del cuerpo para ayudar a eliminar las bacterias y favorecer la cicatrización. Una concentración adecuada de solución salina es fundamental, por lo que recomendamos usar el spray OceanMist para el cuidado posterior de piercings, si es posible.
Con qué frecuencia: Sumerge tu piercing de 3 a 5 veces al día durante 3 a 5 minutos hasta que la irritación disminuya.